¿El de la derecha....usted lo reconoce?

¿El de la derecha....usted lo reconoce? Es Michel Milán Reyes, diputado Presidente de la Asamblea Popular Municipal del Poder Popular del Cotorro, cubano....yo todavía no entiendo esa cantidad de títulos que lo acompañan en su identificación...porque si todo era en Cuba, no conozco realmente si existen todos esos cargos pomposos y vacíos en un país como Cuba pero si así fuera dice muy bien y claramente de la relación íntima de los gobiernos que se intercambian funcionarios con esta facilidad, lo extraño es que un “diputado municipal” baje a la categoría de “gorila” brutal en Venezuela, y a la vez, según además se informa, sea suplente en el Congreso de Venezuela de Amoroso, que de “Amoroso” no tiene nada.
Lo comprobado es que el gorila es cubano, lo que rebate otra información que lo da como servidor comunal en Zaraza.  

Los otros implicados están plenamente identificados A este no pueden borrarlo del mapa en su golpiza a Julio Borges, como tampoco pueden borrar a ese espécimen vulgarsote de Nancy Ascencio que destrozó la nariz de María Corina pateándola también. En esta foto está con otro con pistoletas y billetes de a cien. Los valores del chavismo.

Madurote se fue de boca ofreciendo su versión de lo sucedido en el Congreso para la noche de anoche, como el bolero. Pero quedó como lo que es hoy ante el mundo y lo que no negaremos los venezolanos: como un mentiroso. Un pobre montaje que no convence a nadie. Y lo que dejó sentado es esa improvisación infantiloide y torpe que lo tiene haciendo el ridículo.    

 

Ese es el que con chaqueta tricolor, como una bestia endemoniada, soltaba puñetazos sin detenerse ante la sonrisa de su jefe, DIosdado Cabello, que como si no pasara nada frente a él en una omisión culposa que pagará segundo a segundo en cada letra que se escriba de esta historia. Diosdado da una declaración lastimosa: ”Yo he hablado mucho con ellos(la oposición a la que ha quitado el derecho de palabra por no reconocer a Maduro) Más de lo que ellos creen(¿?) Porque a veces me salgo para atenderlos en mi oficina”.

 

¿Qué tal? Al final o “semifinal” de este capítulo habrá que agradecerles golpes, insultos, narices rotas, empujones y patadas. Son la demostración más triste del terror que le tienen a esta Venezuela que despertó, que tienen frente a frente. Y que no se va a rendir. Hoy impugnamos.